viernes, 22 de julio de 2011

todo se cae abajo..

¿Qué loco no? parece que todo va genial y cuando menos te lo esperas vuelve a caer. Vuelve a estar en el suelo y la verdad es que se te quitan las ganas de reconstruirlo. Y es que es así, la vida es una torre de piezas de juguete que las vas montando, y poco a poco va creciendo, pero cuando ya está llegando al final vuelve a caer, la tristeza se interpone en tu camino y todo se nubla. Tienes que volver a construirla porque tienes que ser fuerte, pero hoy yo no puedo. Estoy sin ganas de nada, y estoy decepcionada con la vida, sí, con esa torre de piezas de juguete, ¿y sabes por qué?, porque ya me ha pasado muchas veces, eso de que la torre caiga, pero es que esta vez, es como si ya fueran demasiadas veces, y yo me canso. Yo me canso de reconstruir y reconstruir, ¿y sabes lo más triste? que siento que no tengo a nadie quien me ayude a hacer que esa torre vuelva a crecer...

lunes, 4 de julio de 2011

felicidad...

Perdí la felicidad por un minuto, horas o quizás días.. todo fue horrible, y todavía sigo sin tenerla por culpa de todo eso que se le llama dolor.
Fui una tonta, me rebajé por el único que nunca debería de haberlo echo, discutí muchas veces con mis padres, y sobre todo se acabó el hablar todos los días con mi mejor amiga. Contarle mis penas, llorar en su hombro, reírnos de nuestros defectos y nuestras estúpideses... todo eso lo eché de menos durante días. Me di cuenta que el verdadero dolor existe y puedes llegar a llorar hasta quedarte sin lágrimas.
Pero, suelen decir que nada es para siempre y por fin, todo eso terminó.
Salgo ganando y aprendiendo. Aprendí que no hay que rebajarse por el que no se lo merece, por el que nunca vas a necesitar, aprendí que no vale la pena discutir por boberías, que hay que aprender a respetar y a agradecer cada cosa que hacen por ti. Y lo más importante; aprendí que el significado de la amistad por fin existe, que el sentimiento de la amistad es real, que no esconde mentiras, que tendré una amiga para siempre, bueno no, una amiga no. Tendré una hermana para toda la vida.
Y ahora, ahora soy feliz. Y cuando llegue el próximo dolor, estaré preparada, y junto a mi hermana derribaré todo lo que nunca hubiera imaginado que podía derribar.